Remitimos el texto leído por nuestra portavoz en lel pleno del Ayuntamiento de La Laguna con motivo de la sesión en la que fue aprobada por unanimidad una declaración institucional de solidaridad con Aminetou Haidar. La intervención de nuestra portavoz se dio en el espacio correspondiente a los colectivos de participación ciudadana.
La Laguna, 17 de diciembre de 2009
Aminetou Haidar lleva más de doce horas ingresada en el hospital. Su vida pende de un hilo mientras en el Parlamento Europeo se aplaza una declaración institucional para no molestar a Marruecos. Las instituciones piden paciencia ante un cuerpo debilitado por la lucha y ante una ciudadanía que observa atónita el juego de los poderosos, una ciudadanía que no deja de sorprenderse con el cinismo, la manipulación, la mentira y el juego de las razones de Estado.
La realidad es que mientras la activista por los derechos humanos saharaui agota sus fuerzas en la Unidad de Vigilancia Intensiva del hospital de Lanzarote, aún hoy hay quienes niegan los hechos que la han llevado hasta allí. Por eso, hoy, lo primero que queremos hacer es recordar lo sucedido en este último mes:
1. El pasado 14 de noviembre, Aminetou regresaba a El Aaiún, capital del Sáhara Occidental ocupado por Marruecos, en un vuelo que procedía de Gran Canaria después de un viaje internacional que realizó para recoger uno de los tantos premios con los que se ha reconocido su coraje y su constancia en la lucha por los derechos humanos de la población saharaui, acorralada por Marruecos en los territorios ocupados.
2. El gobierno de Marruecos impidió su entrada y la expulsó de su país, retirándole el pasaporte.
3. Aminetou reiteró ante el piloto del avión y en Lanzarote que ingresaba en España indocumentada y en contra de su propia voluntad.
4. El piloto del avión español en el que fue expulsada a Lanzarote consultó con las autoridades españolas si se accedía a la imposición marroquí y si se permitía entrar a una indocumentada en el país y éste recibió el visto bueno de las autoridades españolas, saltándose las leyes españolas e internacionales.
5. Se consumaba así un secuestro de Estado en el que participaron los gobiernos marroquí y español.
6. La excusa con la que el gobierno marroquí justificó la expulsión fue que Aminetou se identificó como saharaui en la casilla de nacionalidad del documento de ingreso al país, algo que ya había hecho en otras ocasiones y que no había provocado esta reacción de Marruecos.
7. Desde noviembre pasado, el gobierno marroquí se ha embarcado en una escalada de represión contra los luchadores por los derechos humanos saharauis, de los cuales son víctima otros siete activistas, detenidos y desaparecidos en los territorios ocupados por Marruecos en el Sáhara Occidental.
8. En esta línea, y previendo el retorno de Aminetou tras la recogida del premio internacional que se le había concedido, el gobierno marroquí había decidido su expulsión antes del viaje de retorno, lo que se demuestra con los diversos vuelos a nombre de la líder saharaui que había reservado, en función de las posibles fechas de su retorno a El Aaiún.
9. Ante esta situación, Aminetou se declaró en huelga de hambre el pasado 15 de noviembre, hace ya un mes. Su exigencia es sencilla: que se le devuelva el pasaporte que se le retiró y que se le permita regresar a su país, son su familia. Los dos derechos, reconocidos por la legislación internacional en el marco de los derechos humanos.
10. Aminetou ha rechazado las ofertas del gobierno español porque todas atentan contra su dignidad y sus derechos. El pasaporte que corresponde usar a Aminetou es el que se le ha quitado: un pasaporte marroquí al que tiene derecho como habitante de un territorio ocupado por una potencia extranjera, que es la única condición jurídica reconocida por Naciones Unidas para el Sáhara Occidental.
11. El Sáhara Occidental es hoy el único territorio de África pendiente de descolonizar y esto ocurre 34 años después de que el Estado español entregara vergonzosamente lo que había sido una provincia a los intereses voraces de Marruecos.
12. Sólo la complicidad de las más altas instancias del Estado español, desde el Rey hasta el Gobierno, pueden explicar que la única presión ejercida por España para evitar un desenlace doloroso e irremediable haya estado dirigida hacia la propia Aminetou, intentando convencerla de que abandone su forma de lucha pacífica.
La realidad es que mientras la activista por los derechos humanos saharaui agota sus fuerzas en la Unidad de Vigilancia Intensiva del hospital de Lanzarote, aún hoy hay quienes niegan los hechos que la han llevado hasta allí. Por eso, hoy, lo primero que queremos hacer es recordar lo sucedido en este último mes:
1. El pasado 14 de noviembre, Aminetou regresaba a El Aaiún, capital del Sáhara Occidental ocupado por Marruecos, en un vuelo que procedía de Gran Canaria después de un viaje internacional que realizó para recoger uno de los tantos premios con los que se ha reconocido su coraje y su constancia en la lucha por los derechos humanos de la población saharaui, acorralada por Marruecos en los territorios ocupados.
2. El gobierno de Marruecos impidió su entrada y la expulsó de su país, retirándole el pasaporte.
3. Aminetou reiteró ante el piloto del avión y en Lanzarote que ingresaba en España indocumentada y en contra de su propia voluntad.
4. El piloto del avión español en el que fue expulsada a Lanzarote consultó con las autoridades españolas si se accedía a la imposición marroquí y si se permitía entrar a una indocumentada en el país y éste recibió el visto bueno de las autoridades españolas, saltándose las leyes españolas e internacionales.
5. Se consumaba así un secuestro de Estado en el que participaron los gobiernos marroquí y español.
6. La excusa con la que el gobierno marroquí justificó la expulsión fue que Aminetou se identificó como saharaui en la casilla de nacionalidad del documento de ingreso al país, algo que ya había hecho en otras ocasiones y que no había provocado esta reacción de Marruecos.
7. Desde noviembre pasado, el gobierno marroquí se ha embarcado en una escalada de represión contra los luchadores por los derechos humanos saharauis, de los cuales son víctima otros siete activistas, detenidos y desaparecidos en los territorios ocupados por Marruecos en el Sáhara Occidental.
8. En esta línea, y previendo el retorno de Aminetou tras la recogida del premio internacional que se le había concedido, el gobierno marroquí había decidido su expulsión antes del viaje de retorno, lo que se demuestra con los diversos vuelos a nombre de la líder saharaui que había reservado, en función de las posibles fechas de su retorno a El Aaiún.
9. Ante esta situación, Aminetou se declaró en huelga de hambre el pasado 15 de noviembre, hace ya un mes. Su exigencia es sencilla: que se le devuelva el pasaporte que se le retiró y que se le permita regresar a su país, son su familia. Los dos derechos, reconocidos por la legislación internacional en el marco de los derechos humanos.
10. Aminetou ha rechazado las ofertas del gobierno español porque todas atentan contra su dignidad y sus derechos. El pasaporte que corresponde usar a Aminetou es el que se le ha quitado: un pasaporte marroquí al que tiene derecho como habitante de un territorio ocupado por una potencia extranjera, que es la única condición jurídica reconocida por Naciones Unidas para el Sáhara Occidental.
11. El Sáhara Occidental es hoy el único territorio de África pendiente de descolonizar y esto ocurre 34 años después de que el Estado español entregara vergonzosamente lo que había sido una provincia a los intereses voraces de Marruecos.
12. Sólo la complicidad de las más altas instancias del Estado español, desde el Rey hasta el Gobierno, pueden explicar que la única presión ejercida por España para evitar un desenlace doloroso e irremediable haya estado dirigida hacia la propia Aminetou, intentando convencerla de que abandone su forma de lucha pacífica.
La situación de Aminetou Haidar acumula, por tanto, las siguientes violaciones:
Se está violando su derecho a la libre circulación.
Se está violando su derecho a vivir en su propia tierra.
Se están violando las leyes internacionales.
Se está violando su derecho a vivir con sus hijos.
Se están violando sus derechos civiles y políticos.
Se está cometiendo un secuestro de Estado.
Se están violando sus derechos humanos.
Se está violando su derecho a manifestar su identidad.
Se está manipulando la verdad.
Se está mintiendo a la sociedad civil.
Se está despreciando su derecho a luchar y su forma de lucha no violenta.
Se está dando prioridad a los intereses económicos por encima de los derechos de las personas y de los pueblos.
Se está violando su derecho a la libre circulación.
Se está violando su derecho a vivir en su propia tierra.
Se están violando las leyes internacionales.
Se está violando su derecho a vivir con sus hijos.
Se están violando sus derechos civiles y políticos.
Se está cometiendo un secuestro de Estado.
Se están violando sus derechos humanos.
Se está violando su derecho a manifestar su identidad.
Se está manipulando la verdad.
Se está mintiendo a la sociedad civil.
Se está despreciando su derecho a luchar y su forma de lucha no violenta.
Se está dando prioridad a los intereses económicos por encima de los derechos de las personas y de los pueblos.
Los vaivenes de la diplomacia española, la debilidad de sus declaraciones y actuaciones, la ausencia de una posición clara por parte de las instituciones canarias, la maniobra ejecutada hoy en el Parlamento Europeo desvelan una vez más ante nuestros ojos el comportamiento de un grupúsculo de representantes públicos que se ha apropiado de las instituciones y de los mecanismos supuestamente democráticos para convertirse en los ejecutores de unas políticas que nada tienen que ver con los intereses y los deseos de los pueblos.
Hoy por hoy, el único respaldo seguro con que cuenta la activista y todos los hermanos saharauis es el apoyo de los pueblos, de la ciudadanía consciente. Todas las instituciones y todos los organismos internacionales le han fallado sistemáticamente al pueblo saharaui desde que en 1975 el Estado español se deshiciera de una de sus provincias, entregando el territorio del Sáhara Occidental a la codicia de Marruecos y Mauritania.
Desde entonces, el pueblo canario asiste indignado al espectáculo de la sumisión creciente ante las imposiciones de Marruecos, que se extiende como una plaga en las instituciones centrales y también en las canarias, que dicen representar el interés de los pueblos, pero que, en realidad, actúan a sus espaldas y en nombre de oscuros intereses económicos y de poder.
El pueblo canario desde siempre ha expresado su vocación pacífica y de buena vecindad. Siempre hemos visto en el pueblo saharaui el rostro de nuestros vecinos y vecinas más próximos, nuestros hermanos y hermanas más cercanos. Por eso hoy venimos hasta aquí a decir en voz alta que rechazamos el uso que se está haciendo de nuestro territorio para violar los derechos humanos de una incansable luchadora pacífica y para agredir y humillar a través de Aminetou Haidar a todo el pueblo saharaui, el que resiste en los territorios ocupados, el que espera en los campamentos de refugiados de Tinduf, el que sobrevive en la diáspora, el que lucha en cualquiera de las formas que la historia le ha permitido utilizar.
Es probable que el cuerpo de Aminetou ceda en las próximas horas, pero ella no lo hará nunca. Su acción ya ha pasado hoy a la historia de la dignidad humana. Generaciones enteras hoy y en el futuro recordarán su nombre como un ejemplo de dignidad y de coraje, digno representante de los anhelos de su pueblo.
El desenlace de esta última crisis por la que pasa el pueblo saharaui, para nosotros está claro: Aminetou ya ha desvelado el funcionamiento de las relaciones internacionales, el vacío que se esconde tras las llamadas “formas democráticas”, la miseria moral de los que anteponen sus intereses económicos a los derechos humanos y los derechos de los pueblos, la bajeza de quienes se escudan en los intereses generales, cuando lo que hacen es defender su porción de ventaja. La acción de Aminetou ha dado un empuje al pueblo saharaui, que no se detendrá hasta alcanzar la autodeterminación. En esa lucha, seguiremos acompañando al pueblo saharaui.
Hoy por hoy, el único respaldo seguro con que cuenta la activista y todos los hermanos saharauis es el apoyo de los pueblos, de la ciudadanía consciente. Todas las instituciones y todos los organismos internacionales le han fallado sistemáticamente al pueblo saharaui desde que en 1975 el Estado español se deshiciera de una de sus provincias, entregando el territorio del Sáhara Occidental a la codicia de Marruecos y Mauritania.
Desde entonces, el pueblo canario asiste indignado al espectáculo de la sumisión creciente ante las imposiciones de Marruecos, que se extiende como una plaga en las instituciones centrales y también en las canarias, que dicen representar el interés de los pueblos, pero que, en realidad, actúan a sus espaldas y en nombre de oscuros intereses económicos y de poder.
El pueblo canario desde siempre ha expresado su vocación pacífica y de buena vecindad. Siempre hemos visto en el pueblo saharaui el rostro de nuestros vecinos y vecinas más próximos, nuestros hermanos y hermanas más cercanos. Por eso hoy venimos hasta aquí a decir en voz alta que rechazamos el uso que se está haciendo de nuestro territorio para violar los derechos humanos de una incansable luchadora pacífica y para agredir y humillar a través de Aminetou Haidar a todo el pueblo saharaui, el que resiste en los territorios ocupados, el que espera en los campamentos de refugiados de Tinduf, el que sobrevive en la diáspora, el que lucha en cualquiera de las formas que la historia le ha permitido utilizar.
Es probable que el cuerpo de Aminetou ceda en las próximas horas, pero ella no lo hará nunca. Su acción ya ha pasado hoy a la historia de la dignidad humana. Generaciones enteras hoy y en el futuro recordarán su nombre como un ejemplo de dignidad y de coraje, digno representante de los anhelos de su pueblo.
El desenlace de esta última crisis por la que pasa el pueblo saharaui, para nosotros está claro: Aminetou ya ha desvelado el funcionamiento de las relaciones internacionales, el vacío que se esconde tras las llamadas “formas democráticas”, la miseria moral de los que anteponen sus intereses económicos a los derechos humanos y los derechos de los pueblos, la bajeza de quienes se escudan en los intereses generales, cuando lo que hacen es defender su porción de ventaja. La acción de Aminetou ha dado un empuje al pueblo saharaui, que no se detendrá hasta alcanzar la autodeterminación. En esa lucha, seguiremos acompañando al pueblo saharaui.
Por Aminetou Haidar
Por el Pueblo Saharaui.
Por la resolución definitiva del conflicto del
Sáhara Occidental.
Por el reconocimiento del pueblo saharaui a vivir libre e independiente en el territorio de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD).
Viva la lucha de Aminetou Haidar
Viva el pueblo saharaui
Independencia para el Sáhara YA!!!
Aminetou Haidar vive en la lucha de su pueblo.
Por el Pueblo Saharaui.
Por la resolución definitiva del conflicto del
Sáhara Occidental.
Por el reconocimiento del pueblo saharaui a vivir libre e independiente en el territorio de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD).
Viva la lucha de Aminetou Haidar
Viva el pueblo saharaui
Independencia para el Sáhara YA!!!
Aminetou Haidar vive en la lucha de su pueblo.
Marruecos, Culpable,
España, Responsable.
España, Responsable.
Para más información:
Conchi (Tenerife): 650 989 484.
María Esperanza (Lanzarote): 628 102 795.
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