Que vaya gente, lo vea y cuando vuelva que lo cuente.
Emma Pomar, Pilar Fortuño llegaron a El Aaiún el 12 de agosto a pasar sus vacaciones con el objetivo de conocer a las familias de amigos refugiados saharauis que no han podido regresar al Sahara Occidental debido la ocupación de su país por Marruecos
A su llegada al aeropuerto Norte de Tenerife, procedente del Aiún, nos relatan la experiencia que han vivido estos días y no dejan de hacer hincapié en la necesidad de presencia internacional en la zona.
¿Qué pasó en el Aiún la madrugada del día 23?
Esta madrugada regresaban al Aiún cinco activistas saharauis de dar una conferencia sobre DDHH en Argelia. Parece ser que Marruecos juega con la estrategia del terror, cada vez que los saharauis realizan un acto de rebeldía, como salir de su país y hablar de su situación, su respuesta es represiva a la vuelta. Cuando llegan en avión, en este caso desde Argelia, en el tiempo que bajan del coche hasta la casa, les suelen apalear brutalmente.
Por ello se intenta que haya presencia internacional para evitar estos hechos.
¿Dónde se encontraban en ese momento?
Cuando llegaron los coches con los 5 activistas estábamos en la puerta de la casa del activista Hmad Hamad, haciendo un círculo de seguridad para que pudieran entrar porque suponíamos que estando nosotras no les iban a agredir.
La casa estaba sitiada desde hacía 6 horas por militares y policías de paisano. Nunca habíamos visto tanta policía junta.
Desde que el primer activista puso el pie en el suelo empezó una carga policial contra todos los que estábamos allí. Los policías que iban de paisano, tienen capacidad para hacer cualquier cosa porque Marruecos puede decir que no son policías. Lo curioso de todo esto es que estaban grabando la paliza que nos estaban metiendo, entendemos que lo hacían por si había alguna respuesta por parte de algunos de los agredidos y poder argumentar que los saharauis eran los agresores. Lo cierto es que fue completamente pacífica, ningún saharaui se puso agresivo en ningún momento..
Ayer mismo, le metieron una paliza tremenda a nuestro vecino de 15 años y a su padre, un señor que es muy mayor. Esto está pasando todas las noches y no discriminan entre hombres, mujeres, niños o ancianos.
En el tiempo que hemos estado allí, la policía ha entrado en casa de amigos nuestros por la noche, cuando la ciudad está tranquila. Han reventado las puertas, las verjas de refuerzo, etc. Apagan las luces y arremeten contra todas las personas y contra todo lo que encuentran, rompen ordenadores, neveras…
Hemos visto fotografías de niños de tres años con la cabeza vendada de un porrazo. Es una situación brutal y represiva tremenda.
Sales a la calle y lo normal es que encuentres gran cantidad de coches y furgones de policías.
Después del atropello en la casa de Ahmad Hamad ,el control ha sido mucho más intenso.
¿Fueron ustedes agredidas?
Nos empujaron hacia dentro de la casa y nos caímos al suelo. A mí si me pegaron- dice Pilar- pero no creo que fueran a por mí, está claro, porque podían haberme hecho muchísimo daño, yo estaba al lado de ellos y no me daban con las porras, pero sí con las manos.
Cuando nos tiraron al suelo nos caímos sobre Sultana Jaya que acababa de ser operada de una tortura que los propios marroquíes le habían hecho en un ojo y la tuvieron que meter a rastras. A Ahmad Hamad lo tiraron a suelo, cerraron la puerta y le metieron una gran paliza. Tuvimos que abrir otra vez la puerta y salió Antonio, el chico mejicano residente en España, y fue cuando le empezaron a dar porrazos en la cabeza, la cara, los brazos..
No lo pudimos llevar al médico. Los saharauis no pueden ir al médico porque no los atienden y si lo hacen les dan medicamentos contraproducentes para su enfermedad. e incluso los llegan a envenenar o les inyectan sustancias letales. Por ello nos recomendaron que no lleváramos a nuestro compañero porque podría ser peor el remedio que la enfermedad. Tiene contusiones en la cabeza que no han sido vistas por ningún médico.
¿Han denunciado ante la embajada? ¿Les han dicho algo las autoridades españolas, les han apoyado?
El apoyo que hemos recibido, ha sido principalmente el del pueblo saharaui que vive en los territorios ocupados, pues sin ellos no hubiésemos podido soportar esta situación, por lo que nuestro máximo agradecimiento es para ellos y para los medios de comunicación que han difundido esta noticia. Si no llega a ser por estas dos partes nos hubiésemos encontrado totalmente desprotegidos.
Pensamos que lo que quieren es que te vayas de allí pero nosotras habíamos ido de vacaciones y las queríamos era estar allí y no que nos obligaran a irnos. Los únicos que nos protegieron fueron los saharauis qué saben como funciona la represión marroquí. No podíamos salir a la calle sin ellos porque pasan cosas como que te puede atropellar un coche y luego decir que ha sido un accidente de la población civil, pero no, es la policía que te ha atropellado porque quiere quitarte del mapa.
¿Cómo es vista la presencia de los acompañantes internacionales como es el caso de ustedes, que actúan como escudos de los activistas saharauis? ¿cómo se vive esa situación por las calles?
La presión policial es muy grande, cada día que pasa se van acercando, va aumentando la presencia, te van intimidando para que tengas miedo y te vayas.
No creemos que nos lleguen a tocar en ningún momento por la calle, eso no les conviene, pero lo que está claro es quieren intimidarte para que te vayas.
¿Se ve mucha presencia extranjera?
No. Y desde aquí nos gustaría hacer un llamamiento a la Comunidad Internacional para que vayan a los Territorios Ocupados, porque no se respetan en absoluto los Derechos Humanos y pensamos que habiendo presencia extranjera se puede por lo menos, visibilizar la situación que se vive día a día. Lo que nos pasó a nosotras no fue una situación aislada, esto es una constante allí.
¿Han denunciado esta violación de DDHH que han vivido con sus amigos saharauis ante alguna institución?
Desde luego no fuimos a poner una denuncia a la policía marroquí, lo que pensamos fue acudir a la MINURSO (Misión de Paz de las Naciones Unidas para el Sáhara) para que quedara constancia de que se están violando los derechos humanos. Fuimos hasta sus oficinas nos sacaron un folio en la entrada y un bolígrafo y nos dijeron que escribiéramos lo que había pasado y se lo entregáramos. Nos dijeron bien claro ”Nosotros con esto hacemos un informe secreto, lo enviamos a Los Ángeles pero no va a servir para nada.” No nos quisieron poner ni un triste sello para que lo pudiéramos presentar a los medios de comunicación.
La única baza que tienen los saharauis es que haya gente de otros lugares. En los Territorios Ocupados no hay prensa que informe de lo que les ocurre, nadie se entera de lo que pasa.
Que vaya gente, lo vea y cuando vuelva que lo cuente.
Nuestros compañeros no han regresado porque temen que en el momento en que se vayan, van a ir a por nuestros amigos saharauis. Ellos permanecerán un tiempo más en la zona, hasta que consigan dicen, llegar algún relevo
¿Volverían ustedes? ¿Tienen miedo por los amigos saharauis con los que han estado conviviendo estos días?
Sí, es nuestra máxima preocupación, van a entrar en sus casas, ellos mismos lo dicen, les van a torturar. Nos han contado las torturas que les han hecho y son brutales.Les han colgado del techo por las manos y por los pies y los han violado con palos de escoba. Eso les ha pasado da nuestros amigos- dicen con lágrimas en los ojos. Esto es sólo un ejemplo de los cientos que existen.
“Necesitamos relevo, necesitamos que vaya gente que esté ahí”
El cuidado es mutuo, ellos cuidan de que estés bien y seguro y nosotros con nuestra presencia conseguir que no vayan a por ellos directamente.
¿Cómo es la situación en otras ciudades?
En Dajla y Bojador nos cuentan que es peor, nuestros compañeros que estuvieron allí fueron amenazados de muerte y violación.
¿Tienen constancia de que el Gobierno Español o alguna Institución vayan a interceder por los saharauis?
De momento no, y nos gustaría que así fuera porque el Gobierno Español tiene una seria responsabilidad con los saharauis
¿Se sintieron protegidos por el Gobierno español?
No. El gobierno de Aragón nos propuso ayuda para salir de allí en caso necesario. Se lo agradecemos, pero no se trata de sacarnos de allí sino de podernos quedar sin problemas.
¿Para ir hasta el aeropuerto tuvieron algún tipo de acompañamiento?
Ha sido una decisión muy dura porque los saharauis nos querían acompañar y nos parecía un desafío demasiado contundente. Al final hemos ido los cuatro. Cuando ya estábamos en el aeropuerto, empezaron a aparecer policías de uniforme y de paisano por todos lados. Se han acercado, han saludado a Antonio y le han preguntado si ya se iba a España, presionando todo el tiempo para que embarcáramos todos. Resultó una situación muy violenta que nos forzó a llamar a nuestros amigos para que se llevaran en taxi a Antonio e Isabel para que no los obligaran a embarcar y salir del país.
Nos han registrado como nunca nos lo habían hecho en la vida con el único objetivo de molestarnos e intimidarnos.
A su llegada al aeropuerto Norte de Tenerife, procedente del Aiún, nos relatan la experiencia que han vivido estos días y no dejan de hacer hincapié en la necesidad de presencia internacional en la zona.
¿Qué pasó en el Aiún la madrugada del día 23?
Esta madrugada regresaban al Aiún cinco activistas saharauis de dar una conferencia sobre DDHH en Argelia. Parece ser que Marruecos juega con la estrategia del terror, cada vez que los saharauis realizan un acto de rebeldía, como salir de su país y hablar de su situación, su respuesta es represiva a la vuelta. Cuando llegan en avión, en este caso desde Argelia, en el tiempo que bajan del coche hasta la casa, les suelen apalear brutalmente.
Por ello se intenta que haya presencia internacional para evitar estos hechos.
¿Dónde se encontraban en ese momento?
Cuando llegaron los coches con los 5 activistas estábamos en la puerta de la casa del activista Hmad Hamad, haciendo un círculo de seguridad para que pudieran entrar porque suponíamos que estando nosotras no les iban a agredir.
La casa estaba sitiada desde hacía 6 horas por militares y policías de paisano. Nunca habíamos visto tanta policía junta.
Desde que el primer activista puso el pie en el suelo empezó una carga policial contra todos los que estábamos allí. Los policías que iban de paisano, tienen capacidad para hacer cualquier cosa porque Marruecos puede decir que no son policías. Lo curioso de todo esto es que estaban grabando la paliza que nos estaban metiendo, entendemos que lo hacían por si había alguna respuesta por parte de algunos de los agredidos y poder argumentar que los saharauis eran los agresores. Lo cierto es que fue completamente pacífica, ningún saharaui se puso agresivo en ningún momento..
Ayer mismo, le metieron una paliza tremenda a nuestro vecino de 15 años y a su padre, un señor que es muy mayor. Esto está pasando todas las noches y no discriminan entre hombres, mujeres, niños o ancianos.
En el tiempo que hemos estado allí, la policía ha entrado en casa de amigos nuestros por la noche, cuando la ciudad está tranquila. Han reventado las puertas, las verjas de refuerzo, etc. Apagan las luces y arremeten contra todas las personas y contra todo lo que encuentran, rompen ordenadores, neveras…
Hemos visto fotografías de niños de tres años con la cabeza vendada de un porrazo. Es una situación brutal y represiva tremenda.
Sales a la calle y lo normal es que encuentres gran cantidad de coches y furgones de policías.
Después del atropello en la casa de Ahmad Hamad ,el control ha sido mucho más intenso.
¿Fueron ustedes agredidas?
Nos empujaron hacia dentro de la casa y nos caímos al suelo. A mí si me pegaron- dice Pilar- pero no creo que fueran a por mí, está claro, porque podían haberme hecho muchísimo daño, yo estaba al lado de ellos y no me daban con las porras, pero sí con las manos.
Cuando nos tiraron al suelo nos caímos sobre Sultana Jaya que acababa de ser operada de una tortura que los propios marroquíes le habían hecho en un ojo y la tuvieron que meter a rastras. A Ahmad Hamad lo tiraron a suelo, cerraron la puerta y le metieron una gran paliza. Tuvimos que abrir otra vez la puerta y salió Antonio, el chico mejicano residente en España, y fue cuando le empezaron a dar porrazos en la cabeza, la cara, los brazos..
No lo pudimos llevar al médico. Los saharauis no pueden ir al médico porque no los atienden y si lo hacen les dan medicamentos contraproducentes para su enfermedad. e incluso los llegan a envenenar o les inyectan sustancias letales. Por ello nos recomendaron que no lleváramos a nuestro compañero porque podría ser peor el remedio que la enfermedad. Tiene contusiones en la cabeza que no han sido vistas por ningún médico.
¿Han denunciado ante la embajada? ¿Les han dicho algo las autoridades españolas, les han apoyado?
El apoyo que hemos recibido, ha sido principalmente el del pueblo saharaui que vive en los territorios ocupados, pues sin ellos no hubiésemos podido soportar esta situación, por lo que nuestro máximo agradecimiento es para ellos y para los medios de comunicación que han difundido esta noticia. Si no llega a ser por estas dos partes nos hubiésemos encontrado totalmente desprotegidos.
Pensamos que lo que quieren es que te vayas de allí pero nosotras habíamos ido de vacaciones y las queríamos era estar allí y no que nos obligaran a irnos. Los únicos que nos protegieron fueron los saharauis qué saben como funciona la represión marroquí. No podíamos salir a la calle sin ellos porque pasan cosas como que te puede atropellar un coche y luego decir que ha sido un accidente de la población civil, pero no, es la policía que te ha atropellado porque quiere quitarte del mapa.
¿Cómo es vista la presencia de los acompañantes internacionales como es el caso de ustedes, que actúan como escudos de los activistas saharauis? ¿cómo se vive esa situación por las calles?
La presión policial es muy grande, cada día que pasa se van acercando, va aumentando la presencia, te van intimidando para que tengas miedo y te vayas.
No creemos que nos lleguen a tocar en ningún momento por la calle, eso no les conviene, pero lo que está claro es quieren intimidarte para que te vayas.
¿Se ve mucha presencia extranjera?
No. Y desde aquí nos gustaría hacer un llamamiento a la Comunidad Internacional para que vayan a los Territorios Ocupados, porque no se respetan en absoluto los Derechos Humanos y pensamos que habiendo presencia extranjera se puede por lo menos, visibilizar la situación que se vive día a día. Lo que nos pasó a nosotras no fue una situación aislada, esto es una constante allí.
¿Han denunciado esta violación de DDHH que han vivido con sus amigos saharauis ante alguna institución?
Desde luego no fuimos a poner una denuncia a la policía marroquí, lo que pensamos fue acudir a la MINURSO (Misión de Paz de las Naciones Unidas para el Sáhara) para que quedara constancia de que se están violando los derechos humanos. Fuimos hasta sus oficinas nos sacaron un folio en la entrada y un bolígrafo y nos dijeron que escribiéramos lo que había pasado y se lo entregáramos. Nos dijeron bien claro ”Nosotros con esto hacemos un informe secreto, lo enviamos a Los Ángeles pero no va a servir para nada.” No nos quisieron poner ni un triste sello para que lo pudiéramos presentar a los medios de comunicación.
La única baza que tienen los saharauis es que haya gente de otros lugares. En los Territorios Ocupados no hay prensa que informe de lo que les ocurre, nadie se entera de lo que pasa.
Que vaya gente, lo vea y cuando vuelva que lo cuente.
Nuestros compañeros no han regresado porque temen que en el momento en que se vayan, van a ir a por nuestros amigos saharauis. Ellos permanecerán un tiempo más en la zona, hasta que consigan dicen, llegar algún relevo
¿Volverían ustedes? ¿Tienen miedo por los amigos saharauis con los que han estado conviviendo estos días?
Sí, es nuestra máxima preocupación, van a entrar en sus casas, ellos mismos lo dicen, les van a torturar. Nos han contado las torturas que les han hecho y son brutales.Les han colgado del techo por las manos y por los pies y los han violado con palos de escoba. Eso les ha pasado da nuestros amigos- dicen con lágrimas en los ojos. Esto es sólo un ejemplo de los cientos que existen.
“Necesitamos relevo, necesitamos que vaya gente que esté ahí”
El cuidado es mutuo, ellos cuidan de que estés bien y seguro y nosotros con nuestra presencia conseguir que no vayan a por ellos directamente.
¿Cómo es la situación en otras ciudades?
En Dajla y Bojador nos cuentan que es peor, nuestros compañeros que estuvieron allí fueron amenazados de muerte y violación.
¿Tienen constancia de que el Gobierno Español o alguna Institución vayan a interceder por los saharauis?
De momento no, y nos gustaría que así fuera porque el Gobierno Español tiene una seria responsabilidad con los saharauis
¿Se sintieron protegidos por el Gobierno español?
No. El gobierno de Aragón nos propuso ayuda para salir de allí en caso necesario. Se lo agradecemos, pero no se trata de sacarnos de allí sino de podernos quedar sin problemas.
¿Para ir hasta el aeropuerto tuvieron algún tipo de acompañamiento?
Ha sido una decisión muy dura porque los saharauis nos querían acompañar y nos parecía un desafío demasiado contundente. Al final hemos ido los cuatro. Cuando ya estábamos en el aeropuerto, empezaron a aparecer policías de uniforme y de paisano por todos lados. Se han acercado, han saludado a Antonio y le han preguntado si ya se iba a España, presionando todo el tiempo para que embarcáramos todos. Resultó una situación muy violenta que nos forzó a llamar a nuestros amigos para que se llevaran en taxi a Antonio e Isabel para que no los obligaran a embarcar y salir del país.
Nos han registrado como nunca nos lo habían hecho en la vida con el único objetivo de molestarnos e intimidarnos.
Publicado por: tenerifeconelsahara
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